Dayana Lloria​

Nunca pensé que la vida fuera un sueño, hasta que aprendí a mirar a través del visor de mi cámara, que, a la vez me permitía convertir mis sentimientos y mis deseos más profundos en un mismo instante.



Mi vida una película en blanco y negro que pasa ante mis ojos, pero sin dejar escapar esos momentos en el que, el corazón late más deprisa. Aún así, intento poner un poco de color a este sendero por el que camino, tropezando alguna vez, pero levantándome y aprendiendo más.



Por eso, en ese primer instante que tuve una cámara entre mis manos y la provee  decidí que no volvería a escapar, ya que se había convertido en mi caja de sueños, mi diario y mi vida.